En la campaña Hospitalidad.es de las obras sociales jesuitas y en alianza con otras obras sociales de Iglesia (a través de la Red #MigrantesConDerechos) y organizaciones de la sociedad civil, hemos unido fuerzas para defender a la activista Helena Maleno, defensora de los derechos humanos de las personas migrantes y de su derecho a la movilidad, ante la acusación de tráfico de personas por el gobierno marroquí.
El pasado 31 de enero Helena Maleno declaró en el juicio contra su persona en un tribunal marroquí. Un interrogatorio que duró varias horas y que ha quedado visto para, en las próximas semanas, iniciar el juicio formal o archivar la causa, como ya sucedió en España. La acusación recoge la posible condena a cadena perpetua por tráfico de seres humanos, aunque desde Ca-minando Fronteras, la ONG que lidera Maleno, y otros colectivos de migrantes, aún son optimistas y esperan la absolución, ya que la labor humanitaria durante estos más de 15 años jamás ha sido puesta en entredicho como un posible delito, sino como una forma de salvar vidas.
La Red #MigrantesConDerechos (en la que el Sector Social de la Compañía de Jesús se integra dentro de CONFER, junto a Justicia y Paz, Cáritas y la Comisión Episcopal de Migraciones de la CEE) inició una campaña exprés de recogida de firmas junto a Oxfam Intermón y la Coordinadora de ONG de Desarrollo. Más de 30.000 personas firmaron la petición, en apenas 36 horas, al gobierno español para que informara al marroquí del archivo de la acusación en nuestro país años atrás, ya que aún no lo ha hecho.
En 2012 la UCRIF, Unidad Central de Redes de Inmigración Ilegal y Falsedad Documental, de la Policía Nacional, abre una investigación en la que se acusa a Helena Maleno de colaborar con las redes de tráfico de personas. Cuando el caso llega a la Audiencia Nacional, la Fiscalía archiva la causa por considerar que las llamadas realizadas por Helena Maleno a Salvamento Marítimo, alertando de vidas en peligro en el mar, no eran constitutivas de delito. Sus llamadas, simplemente, salvan vidas. La UCRIF había trasladado la causa también a Marruecos esperando que un juez marroquí condenara la labor de Helena. Tras varios retrasos, el pasado 10 de enero Helena declaró ante el juez marroquí en el Tribunal de Apelación de Tánger.
Helena Maleno es una defensora de los derechos humanos de las personas migrantes en la frontera sur, que lleva años salvando las vidas, con sus avisos a Salvamento Marítimo, de miles de personas que se arriesgan cada día cruzando el estrecho en busca de iniciar un proyecto de vida digno en Europa.