Cada niña tiene derecho a vivir libre de violencia, discriminación, intimidaciones y abusos. Sin embargo, hoy en día la violencia niega este derecho a millones de niñas de todo el mundo: continúa siendo una de las violaciones más persistentes, sistemáticas y generalizadas de los derechos humanos. Por eso, con motivo del Día Internacional de la Niña, que se ha celebrado el 11 de octubre, Entreculturas ha lanzado La Luz de las Niñas «para visibilizar la desigualdad que sufren las niñas, protegerlas frente a la violencia, valorar su capacidad para elegir su futuro e incidir para transformar las causas de la injusticia hacia ellas”, en palabras de Raquel Martín, Directora de Comunicación y Desarrollo Institucional.
240 millones de niñas ven amenazada su vida por la violencia, más de 200 millones de niñas en el mundo han sufrido mutilación genital. Cada año 12 millones de niñas son casadas antes de cumplir los 18. Más de 150 millones sufren violencia sexual. Y 34,2 millones de niñas y mujeres son refugiadas o desplazadas. Estas formas de violencia hacia las niñas provocan en ellas graves secuelas psicológicas, físicas y sociales que las marcan para siempre, y las aleja de la escuela, de su infancia y de sus oportunidades.
Sifa Kaite, Coordinadora de Protección a la Infancia de Servicio Jesuita a Refugiados Chad, hablaba de su trabajo, vinculado con las diversas formas de violencia que enfrentan las niñas refugiadas en los campos y que afirma que “son innumerables” destacando “la mutilación genital femenina (MGF), el matrimonio forzado, el matrimonio precoz, las tareas del hogar, el abandono escolar y la violencia sexual”. Todas estas prácticas dañinas suponen una vulneración de los derechos humanos de las niñas muy grave, truncando su autoestima y desarrollo y obstaculizando su continuidad educativa.
Sofía Gutiérrez, Responsable de Acción Pública de Fe y Alegría Guatemala, conoce la realidad que enfrentan las niñas en su país, muy condicionada por las altas tasas de violencia sexual, embarazos y uniones tempranas, que tienen mayor prevalencia entre la población indígena. “El trabajo de La Luz de las Niñas en Guatemala se concentra en la prevención de la violencia y en la creación de espacios seguros para las niñas en las escuelas”.
“Queremos que brille su luz. Las niñas tienen derecho a una infancia en igualdad de oportunidades, libre de miedos, de amenazas y agresiones. La educación puede defenderlas, proteger sus derechos, transformar sus vidas”, ha afirmado Raquel Martín en el acto de presentación de la campaña.