Libros y mensajes viajan para los niños y niñas refugiados sirios en Líbano

En cualquier rincón del mundo, cuando un niño o niña lee un libro está disfrutando de un momento de paz, juego y aprendizaje. En los lugares donde la infancia vive en situaciones de especial vulnerabilidad estos momentos tienen mayor trascendencia porque les permite abstraerse de la realidad que les rodea y  disfrutar de la lectura. Este es el caso de los niños y niñas refugiados sirios en Líbano que asisten a las escuelas del Servicio Jesuita a Refugiados (JRS) que desde Entreculturas apoyan.

Estos alumnos y alumnas han disfrutado de un momento de paz, juego y conexión con otros niños y niñas en España a través de “Apadrina un libro”, una iniciativa que pusimos en marcha el pasado mes de diciembre junto con la Librería La Fabulosa y en colaboración con la Asociación Álbum de Editoriales Independientes Españolas. Gracias a esta iniciativa, 71 cuentos ilustrados (sin palabras) fueron apadrinados y enviados a su destino, Líbano, junto con mensajes para los niños y niñas refugiados, a los que han podido responder.

La iniciativa contó con dos momentos clave con la realización de dos talleres de cuentacuentos: uno realizado en diciembre en la Librería La Fabulosa en Madrid; y otro en enero, a la llegada de los libros apadrinados, en el colegio Frans Van der Lugt (FVDL) en Bourj Hammoud (Líbano).

El taller en Líbano, al que asistieron 21 estudiantes de 7 a 8 años, fue dinamizado por su tutora, Noor, y el objetivo de JRS para los próximos meses es que los libros sin palabras se sigan empleando en talleres-cuentacuentos tanto en el colegio FVLD como en el centro Nucolas Kuiters en Jbeil, los centros Telyani, Meksi y Nahrya en Bar Elias, y los centros Nour I, Nour II y Dar Al Hanan en Baalbek.

En palabras de Miguel Santiuste, responsable de los proyectos de Entreculturas en el país, que pudo participar en ambos talleres, “nuestros esfuerzos se centran en generar espacios de protección, aprendizaje y recuperación para la población refugiada más vulnerable. Con JRS, proporcionamos educación de calidad basada en valores, y también apoyo con bienes de primera necesidad, como ropa, comida o transporte. Es muy importante que se sientan acompañados y protegidos, es fundamental que mantengan la dignidad y la esperanza.”

Además de los libros, el alumnado participante en el taller también recibió los mensajes llenos de saludos, curiosidad y esperanza enviados por los niños y niñas desde Madrid, a los que pudieron responder. La magia de la lectura ha permitido acercar y conectar lugares e historias aparentemente distantes: porque los libros son conexión, paz y refugio en cualquier rincón del mundo.

300.000 niños y niñas refugiados sin escolarizar
Desde el inicio de la guerra en 2011, aproximadamente un millón y medio de personas sirias han encontrado refugio en Líbano, un pequeño país del tamaño de Asturias. La mitad de estas personas refugiadas son menores. Líbano ha hecho un gran esfuerzo por asegurar la educación de los niños y niñas refugiados, habilitando un turno de tarde específico para ellos, pero sigue habiendo cerca de 300.000 menores sin escolarizar.